08-07-2019 | di COOPI

Guatemala: Aníbal, de un año de edad, se está recuperando de la desnutrición

Aníbal tiene un año y sufre de desnutrición aguda y severa . Esto es bastante común en la pequeña comunidad de Aldea Chiquilá, en la región de Huehuetenango, Guatemala.

"A menudo no teníamos suficiente dinero para comer y cuando nos quedamos sin maíz, sólo comíamos una o dos veces al día. A veces le hacíamos comer hierbas o tortillas con sal, pero él las rechazaba", dice Natividad, la madre de Aníbal.

El personal de COOPI se ocupó de Aníbal: le proporcionaron a su familia harina fortificada y dinero en efectivo para que pudieran comprar alimentos para una dieta más sana y diversificada que mejorara la salud del niño.

"Gracias a COOPI", continúa Natividad, "compramos fruta y otros alimentos. Ahora Aníbal come más". Después del primer seguimiento médico, la salud del niño ha mejorado, aunque todavía necesita apoyo para recuperarse completamente.

Natividad y Aníbal viven en una comunidad aislada con un acceso muy limitado al agua potable -su pueblo está enclavado en las montañas y el agua sólo es recogida por pequeños pozos construidos por sus habitantes.

La mala calidad del agua y la higiene deficiente provocan un aumento de las enfermedades diarreicas que agravan la inseguridad alimentaria en Huehuetenango. Los fenómenos climáticos extremos y frecuentes son otro factor de estrés adicional para las comunidades.

Se necesita una respuesta rápida - por eso COOPI está implementando el proyecto financiado por el departament d'Ajuda Humanitària i Protecció Civil de la Comissió Europea - ECHO "Respuesta a las necesidades humanitarias en las comunidades más vulnerables del Corredor Seco de Guatemala afectadas por la inseguridad alimentaria recurrente y por la debilidad de las capacidades institucionales en la construcción de resiliencia y la provisión de protección social" en los cuatro municipios de la región de Huehuetenango.

El proyecto, que comenzó en octubre de 2018 y finalizará en diciembre de 2019, contribuirá a mejorar los medios de subsistencia de las familias vulnerables de Quiché, Huehuedenango, Baja Verapaz y Chiquimula, facilitando su acceso a las redes de seguridad social y promoviendo la resiliencia de sus medios de subsistencia a nivel familiar, comunitario e institucional.

Nuestro objetivo es mejorar la seguridad alimentaria de unas 17.507 personas a través de acciones demostrativas de transferencias monetarias, el fortalecimiento de las instalaciones sanitarias locales, las buenas prácticas de protección de los medios de subsistencia contra los desastres y los riesgos climáticos.

COOPI continúa trabajando en Guatemala para encontrar soluciones más efectivas a los problemas de inseguridad alimentaria, alentando al mismo tiempo la participación de la población y coordinándose con los gobiernos locales para implementar políticas y planes locales que permitan la inversión en acciones sostenibles y a largo plazo.